jueves, 1 de mayo de 2008

Los peces de la amargura, de Fernando Aramburu

Éste es un fragmento del libro que, por su contenido, creo que resume el argumento del mismo:


“- Toñi, tú no tienes que ocuparte de nada. Yo me encargo. Estoy segura de que muchas personas te acompañan en el sentimiento. Gente buena que lo único que pretende es que no te sientas sola. Y que no te van a llamar por teléfono porque, para empezar, eso da corte y encima sería una lata para ti, imagínate. Una manifestación por las calles..., bueno, eso ya sabes que no te van a hacer porque no se atreven. Eso es mucho riesgo en un pueblo tan pequeño. El miedica del alcalde ni siquiera se ha atrevido a declarar un día de luto. Con que tú tranquila, que yo me encargo.
La vecina había tapado el tablero de la mesa de condolencias [instalada en el portal de su casa] con un paño oscuro. Encima se veía un libro abierto, más bien un cuaderno de tapas duras; al lado, un bolígrafo, y detrás, un crucifijo, un vaso con flores y una vela encendida (...).
La llama de la vela iluminaba la página donde una mano malévola había escrito:
Un enemigo menos de Euskal Herria
ke se joda
Y debajo, a manera de firma: una abertzale.
Una y no un; así pues, mujer. Quizá la señora enlutada que a principios de verano había venido a amenazarla. En un primer instante, a la Toñi aquel escrito de letra torpe y gruesa le causó un pinchazo de lástima. Lástima no por ella, que como ustedes comprenderán bastante quebradero de cabeza tenía la pobre con la pérdida reciente de su marido y con un temor al porvenir que les esperaba a sus hijos, a los que ya imaginaba recluidos en un orfanato, pues el dinero de la indemnización y lo que le habían dicho que le correspondería de pensión no alcanzaba ni de lejos para criarlos hasta mayores. No, no. Su lástima era de otro tipo. Era, cómo les explicaría yo..., una mezcla de desánimo y compasión al ver que existen personas convencidas de que, para formar el país de sus sueños, por fuerza hay que causar dolor al prójimo. Personas con la sangre envenenada por el odio, que a lo mejor vivían a menos de dos manzanas de allí y cuidaban en casa a un jilguero con el mismo amor que si se tratara de un hijo.”


El libro se compone por un puñado de historias reales que, sin estar influidas por ningún tipo de ideologías, pretenden describir el sufrimiento y la angustia de quienes son víctimas del terrorismo vasco en pleno siglo XXI.
A todos ellos, que cada noche encienden una llama en recuerdo de quienes no pudieron vivir en libertad.
Jorge Torrecilla
1º Bach. C

3 comentarios:

Alumno Ejemplar dijo...

Grácias Jorge, tu entrada me ha ido muy bien para encaminar, Los peces de la amargura, libro que me estoy leyendo. Encuentro que es un resumen bastante bueno que me ha ayudado a entender de manera más clara actitudes que toma el autor en algunos momentos, o hechos que no acabo de entender cuando estoy leyendo el libro.

Mireia Casas
1º B

Alumno Ejemplar dijo...

Yo lo leí en el segundo trimestre y la verdad es que el tema del conflicto vasco lo vivo bastante de cerca por temas de familia (tranquilos no somos de la ETA) y la descripción que en muchas ocasiones hace son cuidadas al detalle pero a mí me faltó el comentario sobre la cantidad de familias que estan involucradas en la causa de ETA y a pesar de no poner bombas bajo los coches van abriendo heridas.

Muy bueno el resumen Jorge!

Aker.

Alumno Ejemplar dijo...

Yo lo leí en el segundo trimestre y la verdad es que el tema del conflicto vasco lo vivo bastante de cerca por temas de familia (tranquilos no somos de la ETA) y la descripción que en muchas ocasiones hace son cuidadas al detalle pero a mí me faltó el comentario sobre la cantidad de familias que estan involucradas en la causa de ETA y a pesar de no poner bombas bajo los coches van abriendo heridas.

Muy bueno el resumen Jorge!

Aker.